La Fiscalía pidió prisión perpetua contra el acusado de matar al guardia cárcel

Este jueves 23 de febrero, se realizaron los alegatos finales en el debate oral y público en el que Mauro Miguel Sandoval, de 19 años, es juzgado por el crimen del efectivo del Servicio Penitenciario, Luis Ramón Cáceres, y de intentar matar a su hijo, Enzo Luciano Cáceres, en el contexto de un robo ocurrido en la noche del 28 de marzo de 2022, en el barrio Imbaud de El Colmenar.

En sus conclusiones, la auxiliar de fiscal, Luz Becerra, de la Unidad Fiscal de Homicidios II (a cargo de Carlos Sale), pidió la pena de prisión perpetua contra de Sandoval, por los delitos de homicidio agravado, criminis causa, robo agravado por el uso de arma de fuego operativa y homicidio en grado de tentativa agravado por el uso de arma de fuego. El querellante, Manuel Pedernera, adhirió al pedido de la Fiscalía.

“Quedó claramente acreditado cómo fue el hecho y cuáles fueron las intenciones de Sandoval. Durante el debate, la prueba fue contundente y con certeza absoluta respecto a lo sostenido por el Ministerio Fiscal”, destacó Becerra.

La investigadora valoró el testimonio de la otra víctima y sobreviviente. “Lo que vivió no se va a borrar nunca de su mente. Tuvo que ver morir a su padre. Aquí, tuvo una declaración valiente, contando con mucha espontaneidad que ellos habían entregado todas sus pertenencias”, sostuvo.

El tribunal, integrado por los jueces Dante Julio José Ibáñez, María Alejandra Balcázar y Elizabeth Myriam Raddi, dispuso que el debate prosiga el viernes 24 de febrero, con las palabras finales y la posterior deliberación de los magistrados.

Sangrienta noche

El dramático suceso se produjo en la noche del 28 de marzo de 2022, cerca de las 22:00 horas, en la vereda de un negocio del barrio Imbaud de El Colmenar.

Luis Ramón Cáceres, junto a su hijo Enzo Luciano Cáceres, se encontraban comprando, cuando fueron abordados por cuatro sujetos que se movilizaban en dos motocicletas.

En ese contexto, Mauro Miguel Sandoval y NAY (menor de edad), descendieron de los rodados y encañonaron a las víctimas, a quienes les exigieron la moto en la que circulaban, un celular, dinero y una mochila.
Padre e hijo no se resistieron y entregaron sus pertenencias.

Pero de todos modos, Sandoval le disparó en el estómago a Cáceres hijo. Ante esa dramática situación, Cáceres padre desenfundó su arma reglamentaria y comenzó un enfrentamiento armado en el que Sandoval asesinó al uniformado.

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