La damnificada era una fábrica de Transporte. Allí, delincuentes sustrajeron amoladoras, una grasera neumática, cargador de batería de camiones, una aspiradora, una bicicleta, un soldador y varias herramientas de mano.
El encargado del lugar se percató de la desagradable situación cuando fue a tomar su turno alrededor de las 14 horas. Denunció inmediatamente el hecho en la División Delitos Rurales y Ambientales de Capital, que de forma rápida inició la tarea investigativa.
Un equipo de la Unidad Especial realizó una inspección ocular en el lugar de los hechos y realizó un relevamiento en las cámaras de seguridad de vecinos de la zona, resultado que reveló el accionar de los delincuentes y el vehículo en el que se trasladaban. De esta manera determinaron que los autores del robo eran dos hombres.
En el momento que se encontraban recabando datos, recibieron información que el mencionado Morales se encontraba cargando combustible en una estación de servicio ubicada en avenida Néstor Kirchner, por lo que un grupo de investigadores se dirigió rápidamente al lugar donde efectivamente se encontraba esta persona que fue interceptada y trasladada a la Unidad Especial.
Una vez allí, el sospechosos declaró que si tenia dichos elementos pero que se los había comprado a una persona y que desconocía que eran robadas. Y que por tal motivo devolvería todo lo que había obtenido por parte de este hombre.
Se comunicó esta situación a la Unidad Fiscal de Robo y Hurto, desde la que se dispuso que no se adopten medidas privativas de la libertad y que tanto el vehículo como los elementos recuperados queden secuestrados afectados a la causa robo modalidad escruche.
Por su parte, el equipo investigativo continuará con el trabajo de averiguaciones para esclarecer el hecho en su totalidad.