Una nueva entrega de insumos de librería y útiles escolares efectuada en el marco del programa “Ayudemos a los que ayudan”, una política reparatoria impulsada a través del Equipo de Coordinación de Políticas Reparatorias (ECPR) del MPF, se concretó en el merendero La Merced, ubicado en Benigno Vallejo al 4100, donde se hicieron presentes, junto el ministro fiscal Edmundo Jiménez, equipos del MPF, vecinos, niños y referentes del espacio comunitario.
La actividad forma parte de una serie de acciones que buscan dar respuesta a la creciente demanda de materiales escolares para sectores de escasos recursos. El proyecto, que ya alcanzó a múltiples organizaciones barriales, tiene como objetivo principal acompañar a las familias en situación de vulnerabilidad para que los niños y niñas puedan asistir a la escuela con los elementos necesarios. Además, se busca fortalecer los espacios de apoyo escolar que se desarrollan dentro de comedores, merenderos, clubes y fundaciones de la comunidad.
Las reparaciones fueron gestionadas por las Unidades Fiscales de Robos y Hurtos II y III, Criminal I y II, y la Oficina de Conciliación y Salidas Alternativas, del Centro Judicial Capital.
“Reparar también es ayudar”
Blanca Galván, referente del merendero La Merced, celebró la llegada de los útiles y agradeció el acompañamiento del Ministerio Fiscal. “Estas políticas reparatorias son muy importantes para nosotros. Muchas veces, cuando alguien comete un delito menor, se lo sanciona con una multa. Lo valioso es que esa multa no va a parar a cualquier lado, sino que se convierte en ayuda concreta para espacios como el nuestro, que día a día luchamos por acompañar a los chicos y sus familias”, explicó.
Además, compartió su satisfacción personal por ser parte de este proceso: “Me pone muy contenta saber que hay personas que, al cometer un error, toman la decisión de enmendarlo ayudando a quienes más lo necesitan. Eso también es justicia. Reparar también es ayudar, y esa ayuda nos llega justo donde más se necesita: en los barrios, en los comedores, en las manos de los chicos que hoy tienen cuadernos nuevos para aprender”.
El acto de entrega reunió a niños, familias y voluntarios que forman parte del merendero, quienes compartieron una tarde llena de emociones y esperanza. Desde el Ministerio Fiscal reafirmaron el compromiso de seguir fortaleciendo la red de organizaciones comunitarias que, con trabajo silencioso y constante, sostienen la vida en los territorios más vulnerables.