Bajo su lema “Ayudemos a los que ayudan”, el MPF suministró materiales de odontología y fonoaudiología a la Fundación Gavina. Allí asisten más de 150 pacientes, desde bebés hasta los 15 años.
Este último martes 11 de marzo se realizó una nueva entrega de elementos para instituciones de bien público, mediante las políticas reparatorias que viene implementando el Ministerio Público Fiscal de Tucumán, en el marco de sus proyectos “Ayudemos a los que ayudan”. En esta ocasión, la beneficiada fue la fundación Gavina.
Nacida en 2006, brinda asistencia a niños y adolescentes con FLAP (fisura – labio – alveolo – palatina) o labio leporino, que no cuentan con recursos económicos para llevar adelante los tratamientos necesarios para su rehabilitación. El objetivo es lograr un rostro sin estigmas, con habla y audición correcta, autoestima y equilibrio emocional adecuados, para su integración social.
El ministro fiscal Edmundo Jiménez estuvo presente en la sede de la fundación, ubicada en Córdoba 1151 (planta alta – dpto. 2), donde se procedió al suministro de insumos de odontología y materiales de fonoaudiología. En este caso, la reparación fue gestionada por las unidades fiscales Criminal I, y Robos y Hurtos I, II, III y IV.
“Hay mucha gente que ayuda. Es muy importante que todos los tucumanos conozcan esto que se hace. Entonces ustedes que lo hacen con tanta generosidad, desinterés y sentimientos de solidaridad, van a tener la posibilidad de ayudar más y no tener que estar golpeando puertas. Es impresionante cómo con poco hacen mucho”, expresó el titular del MPF.
Apoyo médico y emocional
“La fundación Gavina tiene18 años trabajando en la rehabilitación de pacientes con fisura de labio y paladar o como, comúnmente se conoce como labio leporino a través de un abordaje interdisciplinario.
Los servicios que ofrecemos, en la parte quirúrgica, son odontología y fonoaudiología, y también hacemos un apoyo en la parte nutricional y psicológica, tanto a los niños como a los papás. “Actualmente contamos con diez profesionales”, describió Gabriela Reinoso, presidenta de la fundación.
Asimismo, manifestó: “Esta es una problemática que va mucho más allá de lo que es la parte estructural de una operación de labio y paladar; también hay muchos otros aspectos que están alterados en estos niños. Sufren mucho bullying en la escuela y en todos los ámbitos sociales. Hay mucha desinformación. A veces se considera que es un niño discapacitado que tiene problemas de aprendizaje y nada que ver. La fisura, de por sí, no provoca una disminución intelectual ni nada por el estilo. Es una lucha constante de la fundación en tener reuniones con las escuelas, con los papás y familiares para que no haya discriminación, que entiendan que es algo transitorio y que con una rehabilitación pueden lograr todo lo que quieran en su vida”.
Por último, Reinoso sostuvo: “Estamos muy agradecidos con el doctor Edmundo Jiménez y el Ministerio Público Fiscal por el aporte que nos han dado para que los niños puedan seguir sus tratamientos de la mejor manera posible, consiguiéndonos insumos y materiales para cada una de nuestras áreas de trabajo”.
Por su parte, Gabriela Lula es una mamá que lleva a su hija Sarahí, de 11 años, a la fundación. “Hacemos unos tres años que venimos. Agradecerle a Gavina porque aquí los niños tienen todo lo que necesitan: médicos y sobre todo mucho amor. Para ellos es de mucho valor. Soy una mamá muy agradecida. La directora es una persona muy luchadora por nuestros chicos. Aquí somos una familia. También quiero agradecer al MPF por su donación y al ministro fiscal, que estuvo presente acompañándonos”.