Fue seleccionada por la Academia Angels gracias a su innovador proyecto para mejorar la calidad de vida de pacientes con ACV.
Antonella Rocío del Milagro Banille es residente de tercer año de Enfermería en Emergentología del efector tucumano. Fue seleccionada por la Academia Angels gracias a su innovador proyecto para mejorar la calidad de vida de pacientes con ACV.
Sobre esto, el subdirector del hospital Ángel C. Padilla, Marcelo Fabián Morales, expresó: “Antonella se presentó como muchas enfermeras de Argentina y de otros países latinoamericanos a una convocatoria de la Fundación Angels, la cual se dedica a la formación y capacitación de Salud en ACV. Fue la única enfermera del país seleccionada y esto nos llena de orgullo como centro formador de profesionales. El Sistema Provincial de Salud forma a todos los profesionales sanitarios a través del sistema de residencias”.
En este sentido, la autoridad recordó que el ACV es una de las principales causas de muerte en el mundo y en el hospital tienen una casuística muy alta. “El servicio de Emergencias es la cara visible de nuestro hospital, porque es donde se recibe al paciente con signos y síntomas de ACV. Tenemos la única unidad estatal de ACV del país; las otras dos unidades que existen son privadas. Se trata de un programa del Ministerio de Salud Pública, que dirige el doctor Luis Medina Ruiz, y busca prevenir, diagnosticar y tratar de forma precoz los accidentes cerebrovasculares”, sostuvo.
Por su parte, Banille contó que la iniciativa Angels está formada por un grupo de profesionales a nivel internacional que trabaja para mejorar la calidad de vida del paciente con ACV. “Se hace hincapié en todos aquellos hospitales o instituciones que tienen una unidad de Stroke, esto es un equipo de neurólogos que trabaja junto a enfermeros para hacer esta detección rápida, tratar de salvar al paciente y evitar todo tipo de discapacidad que le pueda traer a futuro”, comentó.
Y continuó: “Así, Angels lanzó un programa de Mentoreo donde estamos participando todos los países de Sudamérica, cualquier personal de salud afín podía participar. Había diferentes categorías desde capacitar al personal, telemedicina, comunicación y redes sociales. Entré en categoría de mejora en calidad de atención al paciente. Presenté mi proyecto y fui seleccionada dentro de esos 15, de los cuales solamente tres fueron enfermeros”.
El programa de Mentoreo consiste en que a cada seleccionado le asignan un mentor para ayudar a llevar a cabo el proyecto. En el caso de Antonella, el proyecto busca prevenir una recaída de paciente, una reincidencia. “El programa va dirigido a que un enfermero esté enfocado desde el seguimiento del paciente. Cuando la persona llega al hospital y detectamos que es una reincidencia lo que tiene, una vez que sale de peligro le contaríamos sobre el programa, en qué consiste, y le preguntaríamos si quiere participar. Una vez firmado el consentimiento, se le pediría una serie de datos para ser volcados en una planilla de estadística y control. Luego se realizaría el seguimiento de manera interdisciplinaria”, explicó.
La idea central entonces es ayudar y acompañar al paciente en ese proceso. A su vez, busca educarlo para evitar estas complicaciones, darle herramientas para su cuidado, medicación si es necesario y las citas de control con el médico. También el sistema de rehabilitación.